jueves, 7 de junio de 2012

Pesca en la Laguna Chis Chis-Daniel Pavoni

 
 Las mejores capturas se concretan gareteando en la zona del ombú
Continuando con la pesca del pejerrey, en estos tiempos donde las salidas son cada vez más costosas, decidimos hacer un relevamiento de la cercana laguna de Chis Chis, que en este último tiempo subió el nivel del agua por lo que el pejerrey ya había comenzado a picar.
Esta laguna es una de las Encadenadas del partido de Chascomús.
Para esta salida organizamos dos embarcaciones; en una, Carlos, Daniel, y Cristian, y en la otra, Jorge López, Alberto y yo.
El día se presentaba sin viento y con mucha neblina, perjudicándonos para transitar por la ruta 2, pero al llegar al kilómetro 143 y medio, nos desviamos hacia la derecha por un camino lateral que nos conduce al pesquero Faro Monasterio, con servicio de proveeduría, alquiler de botes, bajada de lanchas, sanitarios y quinchos individuales con parrilla.
Al llegar nos recibió Eduardo, encargado del lugar, quién nos indicó que lleváramos la embarcación al sector de bajada de lanchas, las cuales son botadas por medio de un tractor; en el lugar ya estaba Jorge, esperándonos para comenzar la pesca.
Los equipos
Estando las dos embarcaciones en el agua, retardamos la salida, ya que la neblina aun persistía, por lo que decidimos armar los equipos para ganar un poco de tiempo; utilizamos cañas telescópicas de 4 y 4,50 metros, reeles frontales cargados con nylon del 0.26, líneas de diferentes formatos (chupetonas, palitos del 0.35 y "zanahorias" chicas), anzuelos números 1 y 2 de la serie mustand 277 con brazoladas que no superaban los 20cm.; la carnada fue mojarras del puesto El Biguá, ubicado en ruta 2 km 71.
Una vez que teníamos todo armado comenzamos a navegar lentamente, pero como la visibilidad era casi nula, Jorge, detuvo el motor y arrojamos las líneas al agua.
Los primeros piques tardaron un rato en llegar, con algunos dientudos, utilizados rápidamente como carnada y algún pejerrey que otro; pero sabiendo que no estábamos en la zona de pesca, la idea era esperar alguna brisa y buscar un mejor lugar.
Luego de un poco más de una hora comenzó a soplar una suave brisa, la cual empezó a correr la neblina; sin perder tiempo Jorge arrancó el motor y nos dirigimos rumbo noreste, a la zona del ombú.
Mientras navegábamos podíamos ver gran cantidad de gaviotas y gaviotines detrás nuestro, motivo claro de la cantidad de pejerrey que hay en la laguna.
La pesca
Al llegar al ombú paramos a 50 metros de la costa, viendo mucha actividad de pejerreyes en superficie; colocamos las brazoladas a 15 cms. de profundidad, una mojarra, filet colgando y al agua.
Los piques no tardaron en llegar con ejemplares muy robustos y combativos.
Los piques eran muy sutiles y todos fueron clavados del "piquito".
Al cortarse el pique nos fuimos corriendo de lugar, pero cuando el viento se cortaba el pique también.
Fue llegando la tarde y con una veintena de pejerreyes decidimos regresar a la costa, ya que la neblina comenzaba nuevamente a perseguirnos, pero con las ganas de volver ya que los pejerreyes están, pero necesitamos el viento, factor imprescindible para realizar una buena jornada de pesca.

Relevamiento: Daniel Pavoni.
Servicios, carnadas El Biguá, Tel. (02241) 68-7716; pesquero Faro Monasterio, (011) 15-66885000.
Diario El Dia

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